– Era una vez un gangoso que caminaba por la calle y de pronto se encuentra una lámpara maravillosa, y le pide un deseo:
– Deseo que mis padres sean igual que yo.
– Cuando llega a su casa su madre le dice:
– Ennnee ¿é erés ara o-mer?
– Y el gangoso se puso contento que su madre hablaba igual que él.
– En eso llega su padre y le dice:
– Hola hijito, ¿Cómo te fue en la escuela?
– Entonces el gangoso queda pensativo y se pregunta por qué su padre no hablaba igual que él.
– Al rato suena el timbre de su casa, y al abrir la puerta se encuentra con el sodero que le dice:
– O-a, chaigo a so-da.
CHISTES BUENOS
- Sueños hermosos.
- Viudo desesperado.
- Buenas y malas noticias
- Quiero que me corten el cabello
- Astronautas que iban al sol