Regalos Inusuales de un millonario
Un hombre tacaño trabajaba como portero en un edificio donde otro hombre millonario vivía en el Penthouse.
Este último tenía problemas ocasionales de salud.
Un día, mientras el millonario bajaba en el ascensor, sufrió una hemorragia. El portero, preocupado, lo sacó del ascensor, llamó una ambulancia y lo acompañó al hospital.
En el hospital, el médico solicitó sangre urgente tipo 0+. Sorprendentemente, el portero tacaño tenía el mismo tipo de sangre y no dudó en donarla.
Un mes después, como agradecimiento, el millonario le regaló un lujoso auto. Al año siguiente, la misma situación ocurrió, y nuevamente el portero donó sangre para salvar al hombre.
En esta ocasión, el agradecido millonario le obsequió una moto Harley-Davidson.
Luego, al año siguiente, se repitió la situación y nuevamente el tacaño donó sangre para salvarle la vida. Como agradecimiento, esta vez el hombre le regaló una bicicleta.
Curioso, el portero tacaño finalmente se atrevió a preguntar:
– ¿Por qué el primer año me diste un Rolls-Royce, luego una Harley-Davidson y ahora solo una bicicleta? No entiendo.
El hombre sonrió y respondió:
– ¡Oh, es simple! Cada año que pasa, siento que tengo más sangre tuya.
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